miércoles, 22 de diciembre de 2010

Concierto Benéfico

Mañana día 23 de Diciembre de a las 20.00 horas se celebrara en la Capilla de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder,

CONCIERTO BENÉFICO DE NAVIDAD
a cargo de la
BANDA DE NUESTRA SEÑORA SANTA ANA

lunes, 20 de diciembre de 2010

Ayuda a la Bolsa de Caridad de la Hermandad de Gran Poder

Como estaba anunciado para el pasado Sábado día 18, la Hermandad de Gran Poder, realizaría una campaña de Navidad, basada en la recogida de alimentos y donativos, por las calles del centro. Al no poder realizarse dicha salida por motivo de la lluvia, el éxito de la campaña se puede ver disminuido, y la Hermandad solicita la ayuda de sus hermanos y devotos, para llevar todo lo que sea posible, a la misma Capilla, para así, poder atender a las familias mas necesitadas en puertas del día de Nochebuena. El horario de recogida de alimentos y donativos es el mismo horario de capilla de 11 a 1 y de 7 a 9 en horario de tarde.

jueves, 16 de diciembre de 2010

Entrevista en la Revista Mas Pasion de El Correo de Andalucia a Joaquien Moeckel.

Hace ocho años ya que cambió la vara dorada del Baratillo por un cirio en el primer tramo de su cofradía. Pero su nombre ha seguido ligado casi indisolublemente a la actualidad cofradiera. Moeckel ha defendido gratis et amore a varias hermandades en incontables pleitos judiciales, ha promovido cuestaciones entre las cofradías en favor de la Asociación Española contra el Cáncer y ha actuado como representante legal de músicos amenazados por una orden de desalojo municipal, por citar algunos ejemplos. No quiere privilegios que le impongan una mordaza. Moeckel, Joaquín, es un espíritu libre y por eso se atreve a decir cosas que nadie osaría a verlas negro sobre blanco. Él sí.
Pregunta: ¿Cómo ve el panorama cofradiero en la actualidad? ¿Ha cambiado mucho desde su época de hermano mayor?
Respuesta: Sí, sí, muchísimo. Yo le veo hoy día de muy bajo contenido. Veo unos hermanos mayores que, quitando algunas excepciones –que las hay y tengo la suerte de conocer–, son muy sumisos. No hablo de sumisión a la autoridad eclesiástica, que si no estamos sujetos sería mal asunto, sino una sumisión de no darse cuenta el poder que tienen y la responsabilidad que tienen. Hoy por hoy, cualquiera puede ser hermano mayor, antiguamente no.
P: ¿Se siente un jarrón chino dentro de su hermandad?
R: No. Yo he asumido muy bien el papel en mi hermandad. Tengo que decir claramente que mi hermandad me trata muy bien, tengo buenos amigos y, como persona crítica que soy, en lo que discrepo y no me gusta, lo saben de sobra.
P: Usted llegó a entablar un pulso jurídico con el Arzobispado contra la imposición de nazarenas en su cofradía. ¿Qué valoración le merece la iniciativa de Juan José Asenjo de zanjar por la vía del diálogo el asunto de las nazarenas en las tres hermandades que aún se resisten a reconocer la igualdad?
R: A mí me parece fatal lo que ha hecho el arzobispo Asenjo, porque lo que debería hacer primero es entablar un diálogo con la Iglesia Católica para ver cuándo admite sacerdotisas, obispas y cardenalas. Cuando la Iglesia Católica predique con el ejemplo, ya después que nos hable de nazarenas. Yo soy de la Iglesia de Jesús de Nazaret, que primero daba ejemplo y después ya decía a los demás que lo hicieran. Me acuerdo una vez que un cardenal me dijo que la mujer sería sacerdote cuando tenga carisma. Pues yo contesto que la mujer será nazarena del Silencio cuando tenga carisma. Mire usted, venir a darle clases particulares a miembros de la Iglesia Católica cuando la Iglesia no avanza en absoluto no es aceptable. No hay problemas de nazarenos en las cofradías, hay problemas de vocaciones en la Iglesia. A mí no me hacen falta nazarenos ni nazarenas, pero a usted sí le hacen falta vocaciones, porque hay muy poquitas. No sé si en el seminario hay dos o tres seminaristas, así que usted verá.
P: Y si le llega a pillar este asunto de hermano mayor…
R: He asesorado a una de estas hermandades. ¿Que cómo lo hubiera enfocado? Pues mire usted, para que el arzobispo lo entienda, esto es muy sencillo: hay hermandades con un paso, con dos pasos y con tres pasos; hermandades con túnica de capa y con túnica de cola; hermandes con música en los dos pasos, o con música en un paso y sin música en el otro, y hermandades con música de capilla: hermandades de silencio y de barrio; y hermandades con nazarenas y sin nazarenas. Con esta naturalidad, lo hubiese enfocado yo, porque si no, hoy empezamos con las nazarenas, que es muy importante que nos vayamos adaptando, mañana habrá que adaptarse al dinerito, que también es muy importante, y pasado mañana estamos en la cocina diciendo que el cuadro ése es mío y que me hace falta. Y las hermandades, con todo el respeto, por supuesto que forman parte de la Iglesia, porque si no no tendrían ningún sentido, pero son instituciones que se crean por iniciativa de los fieles y a su propia instancia y voluntad, no a iniciativa de la Iglesia. Y esto es muy importante.
P: O sea, que usted defiende la naturaleza privada de las hermandades, ¿no?
R: Sí, sí. Distinto es que, desgraciada o afortunadamente, desde un punto de vista jurídico, Roma ya se pronunció sobre la naturaleza pública de las hermandades. Pero tengo entendido que hay asociaciones privadas de fieles tanto en Barcelona como en Madrid, y aquí en Sevilla. Si no recuerdo mal, la Santa Caridad es una institución privada.
P: ¿Están obligadas las hermandades a ceder sus imágenes para actos pastorales a requerimiento de la autoridad eclesiástica?
R: Más que estar obligadas a ello, deberían estar convencidas de hacerlo. Si hubiera sido el hermano mayor de una hermandad a la que mi arzobsipo me pide colaboración para un acto de propagación de la fe y me siento católico, yo lo haría. Lo que no haría es los camelos que hemos hecho aquí en Sevilla, donde uno se ha escapado por una cuestión técnica, el otro por… En fin, que es una vergüenza, y al final uno ha tenido que decir que yo doy la cara porque me van a poner una corona. Ha sido un poco deplorable cómo se ha llevado políticamente este asunto.
P: Usted galvanizó la reacción de la sociedad civil ante el abandono de la iglesia del Salvador hasta el punto de erigirse en pieza clave de su brillante y meteórico proceso de restauración. ¿Qué siente hoy día al entrar en la Colegial?
R: La verdad es que cuando paso por el Salvador, casi siempre hay una especie como de respiración profunda y a quien recuerdo mucho realmente es al padre de esa magna obra, un señor con nombre y apellidos que se llama Juan Garrido Mesa. Para no ir de falsa modestía, pues sí, es verdad que sin Joaquín Moeckel quizás no hubiera existido Juan Garrido, en el buen sentido. Es cierto que sin el empujón de la iniciativa ciudadana, aquello hubiera quedado muerto. Realmente, cuando paso por el Salvador respiro profundamente y me siento bien y digo ‘mira, esto mereció la pena’. Y que conste que me jugué mucho. Podía haber hecho al payaso. Usted imagínese que yo hubiera puesto aquel primer millón de pesetas y que la gente dijera ‘el tonto éste, quién se ha creído que es’. Y, gracias a Dios, siguieron mucha gente y eso es importante. La sociedad civil no se revitalizó en absoluto, digamos que estaba muerta y le hice un boca a boca
.P: ¿Y por qué no se ha contagiado ese espíritu a Santa Catalina?R: En Santa Catalina, Juan Garrido no está. Con eso le he contestado.
P: ¿Qué relación mantiene hoy día con el cardenal Amigo?
R: Magnífica. Le puedo decir que en el pregón mío de la Semana Santa de Madrid, estuvimos hablando la noche antes del pregón. El día de San Carlos Borromeo, siempre le felicito su santo. Me hace algunas confidencias normales. Yo se las hago a él y tenemos un trato telefónico bastante fluido.
P: ¿Le hubiese aconsejado que diera el pregón de la Semana Santa de Sevilla?
R: No creo que el cardenal se moleste si me hago eco de que hablé con él de este asunto, me comentó que qué me parecía, y le alabé el gusto de haber dicho que no. Lo hubiera visto mal si lo hubiera dado siendo obispo, porque un señor que está manejando su diócesis no debe de opinar a la vez que manda; y ahora lo veo mal porque está demasiado temprana su marcha de Sevilla.
P: ¿Es labor del arzobispo de Sevilla la de dar su visto bueno al pregonero previo a su confirmación?
R: Yo creo que no. Lo que sí es cierto es que la Semana Santa es una celebración primero religiosa y por lo tanto esto no puede ser un pregón laico ni san laico. Un no creyente no puede dar el pregón de la Semana Santa, no tiene sentido. Hay algunas hermandades de Sevilla que tienen el tramo de los agnósticos: tíos que se hacen hermanos de una cofradía y que no creen en Dios y después le hacen poesías al Gran Poder. Yo seré un creyente malo, un cristiano imperfecto, pero creo. Por lo tanto, ¿es labor del arzobispo consensuar el nombre del pregonero? No, pero sí es labor del Consejo de Cofradías saber que a la persona que va a poner tiene que ser una persona creyente. Hacer crítrica desde dentro, ¿por qué no? Ahora bien, lo que no me gustaría es que pasen cosas como con Antonio Burgos: que un señor hable de la Semana Santa, de religión, de cuestiones de la Iglesia Católica donde hay que posicionarse sin ambajes, como el aborto o la eutanasia, y que ahora diga el señor tal que éste lo que ha venido aquí es a dar un mitin. Me pareció deplorable.
P: ¿Cree descabellado que una imagen de pueblo pueda coronarse en la Catedral de Sevilla?
R: ¿Y por qué no? La Catedral de Sevilla es la Catedral de la diócesis y de la metrópolis. La Catedral no es patrimonio de las hermandades del centro. Para mí sería emocionante y la gente de esa localidad podría disfrutar de la misma categoría que puede disfrutar una hermandad de la capital.
P: El monumento a Juan Pablo II sigue sin ubicación. ¿Considera que las cofradías están siendo un tanto ingratas con la figura de este Pontífice?
R: Yo creo que un tanto ingratos han sido algunos miembros de alguna junta que no han querido seguir las directrices de su hermano mayor. Son libres para pensarlo, pero me ha parecido quizás un ajuste de cuentas interno de hermandades. Juan Pablo II para mí es el personaje del siglo XX. Sólo hay que ver la devoción que existe en torno a su tumba en el Vaticano. Para mí es vergonzante que existan en Sevilla monumentos para cantaores, y otras personas con menos entidad, y que un líder mundial como Juan Pablo II, más allá de su simbología de carácter religioso, no tenga un sitio para ubicar su monumento. Si fuera el alcalde de esta ciudad tendría clarísimo el sitio: la esquina del magnolio de la Catedral.
P: ¿Los quinientos años de una hermandad justifican una salida extraordinaria?
R: Sí, pero 434 y medio no.
P: ¿Cómo analiza la relación de Asenjo con las cofradías en su primer año de pontificado? ¿Hay un giro respecto a su predecesor?
R: Desde mi punto de vista, monseñor Asenjo al principio quizás ha estado torpe, con todo el respeto del mundo, porque este señor tenía la obligación como pastor de haberse asesorado de personas que conocieran bien el paño. Porque de las hermandades se puede extraer un jugo importante. Con todo respeto le digo a monseñor Asenjo desde estas líneas que muchos son los caminos que llevan a Dios, pero las hermandades quizás sean la mejor forma vehicular de ser cristiano en Sevilla. Debería de haberse asesorado un poco más y haber sabido cuál es la idiosincracia de las hermandades que somos mu buena gente, pero hay que sabernos tratar.
P: ¿Le hubiera gustado ser delegado de la Madrugá?
R: Bueno…, no sé si gozaba de la confianza de ciertas hermandades, pero sí de su cariño. He recibido tres cartas que me han mandado la Macarena, el Gran Poder y la Esperanza de Triana deseándome que me restablezca pronto.
P: ¿Le veremos alguna vez en el Consejo?
R: Ya pienso que me pilla a trasmano. Las personas tienen una edad, unos momentros y unas ilusiones. Cuando terminé de ser hermano mayor del Baratillo me vi con mucha fuerza personal, no sólo física sino psíquica, de tirar adelante y aspirar a ello. En aquel momento había un muy buen presidente que era Manuel Román que decidió presentarse a la reelección y es que ni me lo planteé. Y en el tema de delegado de la Madrugá, ahora agradezco a los hermanos mayores haberme hecho pasar ese cáliz. Yo puse unas condiciones, que el nombramiento fuera por unanimidad. No quería ser el delegado de la Madrugá de cuatro contra dos ni de tres contra tres. Algnas juntas de gobierno decidieron que yo no era la persona idónea y lo respeto. Me basta con su cariño.

Campaña de Navidad

En estos días tan significativos de Diciembre, nos reunimos los católicos y creyentes, para celebrar el Nacimiento del Hijo de Dios en familia y en Hermandad. Por desgracia, y debido a la situación económica de la Nación, son muchas, muchisimas las familias que estos dias, no tendrán nada en la mesa con lo que celebrar la llegada del Niño Dios, así como algo que regalar a sus hijos, la mágica noche de los Reyes Magos. No sólo en Navidades es fecha para colaborar y ayudar al necesitado, el año entero se trabaja y coopera con esta labor interminable, pero si es cierto que esta fecha es diferente en todos los aspectos. Por tal efecto la Hermandad de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder y la Hermandad de Santa Ana, llevarán la labor conjunta de recogida de alimentos, juguetes y dinero en metalico, para ayudar al necesitado. Este sabado a partir de las 11 de la mañana, se recorreran las principales calles del centro para llevar a cabo esta recogida. Seguramente por la algarabia, y por la musica, se nos oyera llegar, pero si por cualquier motivo no pudieras esta mañana ayudar, las mismas Hermandades, ponen a disposicion, sus Casas de Hermandad, para continuar esta labor de recogida, que este año en especial, debe ser prioritaria para todos los cristianos. Colabora con nosotros, es indispensable tu ayuda.