Lo siento, pero la miro y me rió. Es en Sevilla, eso está clarísmo. Ya se público en este blog, la fotografía de un nazareno sentado en una vespa, descansando supuestamente, ahora tenemos aquí la de un nazareno, avanzando en otra vespa, dirigiéndose hacía algún lado, no sabemos si hacia el templo o de regreso a su casa, por que se le ha olvidado algo. Algunos amigos mios un poco maliciosos, ya lo comparan un buen amigo y hermano, muy aficionado a las motos y a la enseñanza de su conducción. Yo mismo puede contemplar hace ya algunos años,por la avenida de la palmera, un Martes Santo, como dos penitentes de la Cofradía Estudiantil, iban muy bien plantados con sus capirotes incluso, en una motocicleta, a toda velocidad. Aquello me pareció divertido, pero esto es mucho mejor. Incluso lleva el cartón puesto.
Esperemos no encontrárnoslo y por que yo de a más de uno que le iba a dar un patatús.
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