lunes, 16 de febrero de 2009

con la venía


A veces no nos enteramos que esto es un pueblo, estoy harto de repetirlo. Y no podemos regirnos por formulas que en Sevilla sirven. Donde tienen capataces estrella, donde tienen Titulares apoteósicos, donde tienen pasos que son obras de arte andantes, y sobre todo, por que aquí nos conocemos todos y todos servimos. No entraré a pronunciarme ni a favor ni en contra de nadie en particular, pero, las obras mal echas, se que a la corta o a la larga, pasan facturas. Hablo por experiencia, mil veces me he tropezado en obras mal ejecutada, mal planteadas, mal llevadas a cabo, y sé y he aprendido, que antes o después, esa fullerías se me pondrán delante. Así que en estos días, donde se ponen y se quitan gente como si fuera un tablero de ajedrez, sólo expreso mi preocupación, por crear la incertidumbre y la división en el hermano. El caciquismo como forma de gobierno, no es si no una utopía hacía el fracaso. ¿no es mejor el diálogo?, pienso profundamente que si. En el diálogo como formula regenedora y valedora de los problemas, y si la charla no sirve, pues será el momento de cuestionar la posición.
No puedo valorar a la persona o mejor dicho, juzgarla por mi deseos personales, la Hermandad, está, ha estado y estará, siempre, estén los hemanos que estén, y eso parece que muchos no lo tienen muy claro. Y debemos posicionarnos en el trabajo bien realizado, en la convivencia, donde cada uno con su valía, haga salir adelante el proyecto.

Los decretazos en las Hermandades, suelen salir muy caros, bastante diria yo, sobre todo, si no se tiene claro el concepto de Hermandad, por que parece que se nos esta olvidando.

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